preparación

• El paso más difícil es desmigar el pan, más que difícil es laborioso. Cortar el pan en trozos pequeños, cuanto más pequeños mejor. Para facilitar el trabajo podéis triturarlo poco a poco en el accesorio triturador de la batidora o en cualquier robot de cocina.
  Una vez triturado todo el pan debéis ponerlo en un bol grande y humedecer el pan con agua, bastará con salpicarlo un poco con vuestras propias manos, removerlo y notar que todo el pan está humedecido.
• En una sartén grande y honda (yo uso un wok) dorar los dientes de ajo machacados y con piel con un chorreón de aceite de oliva.
• Cuando estén dorados, los retiras y en el mismo aceite freír los pimientos verdes, de esa forma el aceite se impregnará del sabor del pimiento.
• Retiramos los pimientos y reservamos. Ahora es el turno de la carne, añadiremos a la sartén los chorizos, la morcilla y la panceta, todo cortado en trozos pequeños, me encanta el sabor que va dejando en el aceite.
• Ya sólo queda añadir las migas del pan y remover constantemente a fuego medio bajo hasta observar que quedan sueltas y tostaditas, yo aproximadamente estoy removiendo durante unos 30 minutos.
• Unos minutos antes de finalizar añadir el ajo reservado y las tiras de pimiento, remover y servir.
• Os preguntareis si no añado sal, normalmente el pan ya trae su propia sal y el chorizo también. además los ingredientes que le añadáis después como el pimiento frito o el huevo frito, ya aportan su toque de sal, no es conveniente abusar , pero probar y rectificar.
• Es hora de emplatar, servir vuestras migas en un plato grande acompañadas de un huevo frito, pimientos, aceitunas…
  Mejor poner una fuente y que cada uno se sirva al gusto.
  Éxito asegurado, no dejéis de hacerla, espero que os guste.